domingo, 11 de octubre de 2015

Dibujo de un año …

Doce meses para explorar en terrenos ignotos, para re descubrir lo natural y artificial del espacio que habitamos. Cincuenta y dos semanas para deslumbrar como viajeros las entrañas del tiempo y la aventura de la vida. Trescientos sesenta y cinco días para redimensionar los sentidos. Ocho mil setecientos, sesenta horas para sentir lo macro y micro del recorrido experiencial. Cinco millones doscientos cincuenta y seis minutos para flotar entre emociones, sentimientos, pensamientos, ideas, acciones. Treinta y uno, millones, trescientos sesenta mil segundos para avanzar, errar, transformar, reconfigurar y aprender, saltando entre eslabones, que nos afirmen como seres genuinos que perecerán, para renacer…